Suave
Como cuando estabas, me desperte sediento.
No tropecé con tus zapatos, fue solo con mis pantalones, los que ya no ordenas, antes de dormirte.
El sol entró en mi habitación, como cuando no entraba cuando estabas, recuerdas que cerrabas las persianas por las noches?
No apagaste mi despertador, y él extrañado, dejo de sonar sólo, a la misma hora en que te despertabas a hacerme el desayuno.
Mi café es mas amargo sin vos, pero lo que más extraño, es mi beso de despedida, cuando ya dormías nuevamente.
Como cuando estabas, dormí poco en la noche.
Me desperté por ruidos y nadie me dijo: "quédate, es el perro".
Me desperté mojado, me di cuenta por el frío que corrió por mi espalda, al darme la brisa, no porque me tocaste la espalda, y me lo dijíste.
Como cuando estabas, me miré al espejo.
Ya no estas detras mío, para arreglarme la camisa.
Ya no estas delante mío, para sonreirme y mirarme a los ojos.
Ya no estas a mi lado, para soñar juntos.