De hace un siglo...
Si puedes llevar la cabeza sobre los hombros bien puestos, cuando otros pierden, y de ello te culpen.
Si crees en ti cuando todos de ti dudan, pero tienes en cuenta sus dudas.
Si puedes esperar sin que te canse la espera, o soportar calumnias sin pagar con la misma moneda.
O ser odiado sin dar cabida al odio, y no por eso parecer demasiado bueno, sabio.
Si puedes soñar sin que tus sueños te dominen.
Si puedes pensar sin que tus pensamientos sean tus metas.
Si puedes ver todo con triunfos y con desastres y tratar por igual ambos farsantes.
Si puedes tolerar que los idiotas targiversen la verdad que has expresado y la conviertan en trampa para necios.
O ver en ruinas la obra de tu vida, y agacharte y reconstruirla con viejas herramientas, y con tus manos aunque se lastimen.
Si puedes hacer un atadito con todas tus ganancias y arrojarlas al capricho del azar.
Y perderlas, y volver a empezar desde el principio sin que salga de tus labios una queja.
Si puedes poner al servicio de tus fines corazon, entusiasmo y fortaleza, aun agotado y resistir aunque no te quede nada, salvo la voluntad que te diga "adelante".
Si puedes dirigirte a las multitudes sin perder tu virtud y codearte con reyes sin perder la sencillez.
Si no pueden herirte los amigos ni enemigos.
Si todos cuentan contigo, pero no en demasia.
Si puedes llenar el implacable minuto, con sesenta segundos de esfuerzo denodado.
Tuya es la tierra y cuanto hay en ella, hoy, y mas aun, eres un muy buen hombre.
Se que aun estas ahi, y te admiro.